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293 – Historietas de navidad

por: Mario Dvorkin, Claudio Díaz & Gonzalo García

Lo que denominamos cultura occidental es el resultado de la fusión del imperio romano (con toda su raíz oriental) con los pueblos europeos de origen céltico, germánico, nórdico, ucraniano, etc. Es por esto que muchas costumbres y festividades de diferentes cultos se fueron fusionando en una sola celebración. La más notoria es la Navidad, que incluye junto al nacimiento de Jesús, las festividades del solsticio de invierno como Apolo y Saturno en la Roma clásica, Mitra para los hindúes, Hutzilopotchli para los aztecas e Inti para los Incas, Freya la diosa de la naturaleza vikinga y Yule. Estas últimas se realizaban alrededor de un árbol que representa el árbol de la vida, duendes nórdicos como Papá Noel y santos italianos como San Nicolás, todo en un mismo paquete.

Lo cierto es que especialmente desde el siglo XVIII con Dickens, esta celebración adquiere un sentido de redención, segundas oportunidades y milagros locales que se han convertido en el estándar de las películas, los libros y por supuesto, las historietas. No conocemos cual fue la primer historieta sobre la navidad en forma específica, pero al ser tan relevante en el hemisferio occidental y especialmente el boreal, las tiras diarias comienzan a tener especiales navideños en las primeras décadas del siglo XX.

En la argentina, la revista Patoruzú comienza con su Libro de Oro en 1937/38 y en la posguerra las dos revistas de BD belgas tenían sus especiales navideños (Tintín y Spirou) con recopilaciones y material extra.

En 1957 Franquin, con la ayuda de Jidehem y Will, crea a Petit Noel, un niño de clase baja ayudado por Marsupilami y amigos en historias de redención navideña.

En los Estados Unidos, casi todos los héroes o superhéroes han puesto su figura al servicio de alguna hazaña que ayude a fomentar el espíritu navideño en la gente.

La ilustración tiene un impacto especial al renovar la figura de Papá Noel en atuendo rojo y blanco realizado por Haddon Sundblom entre 1931 hasta 1966 para la Coca Cola.

The Silent Night of the Batman por Neal Adams y Mike Friedrich, 1969, con un total de 8 páginas, sin intervención de Denny O’Neill, guionista regular de los cuatro años que duró esta época. El comisionado Gordon pide a Batman que se tome la noche libre y acompañe al cuerpo de policía a cantar villancicos. Mientras él deja de vigilar, una serie de delitos son evitados gracias a la fama de Batman y al espíritu navideño.

Caravan Kidd, 1986, es un manga de aventuras y humor creado por Johji Manabe. Wataru, un muchacho humano y Baboo, un akogi, humanoide con aspecto de pikachu color blanco, cuya única vestimenta es un casco de aviador y un pañuelo al cuello, son dos comerciantes buscavidas y ventajeros a los que les va a veces bien, a veces mal, por los caminos del imperio Helgebard en un planeta lejano poblado por multitud de especies, muy en la onda de Star Wars aunque con más humor.

Entonces cruzan sus caminos con los de Mian Thoris, una guerrera que lucha por la independencia del planeta, aunque eso signifique la destrucción de cada pueblo que visita. Aunque ellos lo ignoran, Mian es un androide preparado para acabar con el imperio. Mian los elige como mascotas porque piensa que son personajes promedio y representan lo bueno y lo malo del planeta, y les coloca collares que les impiden alejarse. Así pasan a trabajar para ella como esclavos, aunque como son indominables, Baboo por su codicia que lo hace superar con mucho a Tío Rico y Wataru por sus deseos amorosos hacia la bella Mian, quien lo pone en su lugar y castiga cada vez con suma facilidad. Así, el trío viaja de pueblo en pueblo, de ciudad en ciudad, siempre actuando contra la emperatriz Shion, durante unos 32 episodios. Precisamente uno de ellos fue un especial de navidad, cosa extraña tratándose de un manga, en el cual nuestros amigos se encuentran en un bar con uno de los renos, muy parecido a Rudolf, completamente ebrio, que les pide ayuda para recuperar a la hija de Santa Claus, quien se ha dedicado a la vida disipada y olvida sus responsabilidades. Hubo también otro especial dedicado a San Valentín, pero de ese hablaremos en el podcast correspondiente, si nos acordamos.

Klaus, 2015, escrita por Grant Morrison y dibujada por Dan Mora, es una versión muy distinta, más oscura y primitiva del origen de Papá Noel. Klaus es un cazador solitario que se acerca a los pueblos y ciudades para comerciar. Al acercarse a uno de estos pueblos, Grimsvig, la guardia de la ciudad lo vapulea y le roba sus pertenencias y pieles, pero su lobo blanco llega a tiempo para salvarlo. Como puede regresa a su choza y toca una extraña flauta élfica (o no, pero lo parece), que lo sume en trance y ahí es donde aparece toda la parafernalia élfica mágica. Cuando despierta del trace ha tallado numerosos juguetes y autómatas sin acordarse de nada. Vuelve al pueblo que lo expulsó para enterarse que el rey Magnus es un histérico que odia los juguetes y cualquier clase de felicidad o diversión. Para peor, está casado con una antigua novia de Klaus, Lady Dagmar, y tienen un hijo, Jonas, que es de lo más malcriado que se ha visto desde Jaimito y Daniel el Travieso. Ah, pero el verdadero enemigo no es el rey malvado, sino el viejo y conocido krampus, esa versión malvada del propio Klaus que busca castigar a los niños que se portan mal y, ya que estamos, a los adultos también.

Uncle Scrooge: Christmas on Bear Mountain, 1947, es la primera aparición de Tío Rico, por Carl Barks. El ermitaño y avaro millonario invita a sus sobrinos a pasar la navidad en una cabaña en las montañas. Se disfraza de oso para asustarlos, para saber si son dignos de ser sus herederos. Pero cuando ellos salen de la cabaña para buscar un árbol entra un osezno y se atiborra de comida. Luego llega la madre osa y asusta a los patos. Donald intenta atar a la madre pero se desmaya en brazos de la osa, mientras los sobrinos persiguen al osezno. Tío Rico regresa, ve a Donald en los brazos de la osa y piensa que está dormido plácidamente, mientras los sobrinos corren al osito. Eso lo lleva a pensar que son todos muy valientes y dignos de ser sus sobrinos.

Vida y obra de Santa Claus (Santa Claus, la leyenda de Papá Noel), 1992, dibujada y adaptada por Mike Ploog, sobre la historia original de Lyman Frank Baum, el mismo escritor de las novelas del país de Oz. Excelente historieta en formato álbum autoconclusivo a color. Papá Noel está viejo y enfermo. Sus amigos del bosque, animales y duendes, lo llevan junto al rey Gnomo para que lo salve y pueda continuar con su trabajo de juguetero. Pero habrá que convencerlo de que es un ser humano especial y que merece el don de la vida y de la inmortalidad. El rey de los seres mágicos está dispuesto a escuchar, si le cuentan la vida del anciano. Esta historia también fue adaptada en un especial para televisión por la compañía Rankin Bass, con muñecos animados cuadro a cuadro. Mike Ploog hizo numerosos trabajos para Marvel, en especial adaptando El Planeta de los Simios, El Motorista Fantasma y Conan el Bárbaro.

Disney ha realizado unas historias de navidad en las tiras diarias de los periódicos.

The Spirit, creado por Will Eisner, también realizó historias de navidad de aproximadamente 6 páginas que se publicaban en los periódicos.

Independientemente de sus orígenes religiosos  y su posterior evolución, la Navidad se ha convertido en uno de los acontecimientos festivos mas importantes para occidente y su presencia representa  una nueva oportunidad para redimirse y generar pequeños pero significativos milagros que queden plasmados en la pantalla o en el papel y nos permitan seguir creyendo en la humanidad.