Una Historia de la Fantasía 04 – Abraham Merritt, horror fantástico y civilizaciones desaparecidas
por: Claudio Díaz
Hola, bienvenidos a un nuevo episodio de Una Historia de la Fantasía. Se acerca la primavera a Buenos Aires y retorna el buen clima, que nos permite grabar al aire libre. En esta oportunidad quiero hablarles de un autor que ha sido solicitado con mucho entusiasmo, en especial por el amigo Christian Vallini Lawson, del cual no hay mucha información en castellano en las redes. Del autor quiero decir, no de Christian, quien por fortuna inunda las librerías con los pulps modernos que difunde, fomenta, dirige o en los cuales colabora. Viaje al Futuro, Cuentos de Ciencia Loca, Aventurama… ¿Con títulos así, quién puede resistirse? Y como todo tiene que ver con todo, hoy vamos a recordar a uno de los pioneros de la literatura pulp: Abraham Merritt.
Nacido en 1884, Abraham Merritt estudió abogacía pero eligió dedicarse al periodismo, primero en el Philadelfia Inquirer y luego, a partir de 1922, en el American Weekly, donde además fue asistente editorial. El 1937 pasó a ser el editor, hasta su muerte en 1943. Este trabajo le permitió descubrir y apoyar a los artistas Virgil Finlay y Hanes Bok, muy conocidos por sus estupendas ilustraciones de ciencia ficción y fantasía.
Abraham Merritt ganaba muy bien y eso le permitió viajar por todo el mundo, desarrollando un gusto especial por las ruinas de civilizaciones olvidadas. Otro de sus intereses era adquirir y coleccionar libros de ocultismo y brujería. Se dice que en su biblioteca había unos 5000 libros sobre esoterismo. No contento con eso, en su jardín cultivaba plantas relacionadas con esta materia. También coleccionaba máscaras tribales, armas y esculturas primitivas. Un personaje hecho y derecho. Pero debía ser muy buena persona, porque sus empleados lo recordaban como el jefe ideal que se jactaba de no haber despedido nunca a nadie.
Mi primer contacto con Merritt, yo tendría unos doce años, más o menos, fue gracias a una antología publicada por Bruguera, Las Mejores Historias de Horror, seleccionadas por Forrest Ackerman, coleccionista y estudioso de fama mundial que no necesita presentación. Entre sus numerosas historias figura un relato escrito a diez manos, o cinco plumas, esto es, una obra que comienza un autor y siguen luego sus colegas hasta completar la ronda.
El relato en cuestión tiene el fabuloso título de El Desafío del Más Allá, y fue escrito en 1935 por Catherine L. Moore, H. P. Lovecraft, Robert Howard, Frank Belknap Long y, por supuesto, Abraham Merritt. ¿Quién era este autor que se atrevía a mezclarse con tamaños nombres de la fantasía? Me puse a buscar entre canjes de revistas y librerías de viejo, pero no era una tarea fácil. No aparecía nada, y en aquella época no había vendedores especializados que nos dieran una mano.
La obra de Abraham Merritt podía estar en cualquier estante o batea, mezclada con las revistas Radiolandia, Canal TV, Mucho Gusto o, en el mejor de los casos, Mecánica Popular. Un día me topé con un pilón de revistas Rojinegro, publicación pulp local que duró décadas pero que, como sus tapas estaban dedicadas casi siempre a relatos del oeste, yo no les daba importancia. ¡Cual sería mi sorpresa al encontrar entre ellas esta portada fabulosa que anunciaba Las Siete Huellas de Satán, gran folletín fantástico por Abraham Merritt, publicada en septiembre de 1940!
La novela original se llamaba Seven Footprints to Satan, algo así como Las siete huellas hacia Satán, y estaba acompañada por las ilustraciones originales de Virgil Finlay, gran ilustrador fantástico, puntilloso y realista como pocos, a quien seguro dedicaré un video más adelante.
Esta es una de las historias de tentaciones demoníacas más poderosas que jamás haya leído. La trama nos dice que, escondido en los bajos fondos, hay un cerebro criminal que recluta gente idónea con la promesa de fama y fortuna fáciles, pero a cambio deben cederles el control de sus vidas y, si la suerte no los acompaña, quizás el alma. Este Satán que da nombre a la historia, ¿es un mafioso astuto que controla el mundo del crimen a través del terror, o es en verdad un ser maléfico sobrenatural? Y si es así, ¿cómo podrá James Kirkham, nuestro protagonista, escapar de su influencia?
El relato fue tan popular que en 1929, apenas un año después de su publicación, se hizo una adaptación cinematográfica coprotagonizada por Thelma Todd, más conocida por sus papeles humorísticos junto a los hermanos Marx. Pero no lo busquen, porque saldrán defraudados. En una entrevista posterior, Merritt dijo que lloró durante toda la película, y no de emoción precisamente. Peor aún, la mala adaptación hizo que las ventas del libro bajaran estrepitosamente. Por decisión del director Benjamin Christensen se filmó como una comedia, y el resultado no le hace justicia a una obra tan perturbadora. Y eso que estamos hablando del mismo Christensen que dirigió Haxan, una historia de la brujería, en 1922.
Debo aclarar además que el número de Rojinegro contenía solamente la primer parte de la novela, y que su continuación no aparecía en ningún local de libros usados, por lo que pasé bastante tiempo imaginando posibles finales para la historia.
Muchos años después, ya de adulto, de paseo por Parque Centenario, di con un filón impresionante en uno de los puestos de libros: varias novelas de Merritt en ediciones de Avon Publishing: The Metal Monster, The Ship of Ishtar y, por suerte, Seven Footprint to Satan.
Para ese entonces había aprendido a leer el idioma de Poe bastante bien, y les puedo asegurar que, pese al tiempo transcurrido, el desenlace de la historia estuvo al nivel de mis expectativas.
Abraham Merritt escribió unas ocho novelas y varios relatos cortos, como el que figura aquí, Los Habitantes del Pozo, o en la versión original: The People of the Pit. En este, dos buscadores de oro se internan en el Yukón y, tras acampar muy al norte, ven unas luces sobrenaturales que parecen buscar algo o alguien entre las montañas y bosques nevados. Luego llega un fugitivo hasta su hoguera, reptando sobre miembros tan desgastados que dejan entrever los huesos, debido a la desesperación por escapar de sus captores. El recién llegado, luego de dormir lo suficiente y reponer algo sus fuerzas, les cuenta a los protagonistas una historia de ruinas primitivas, civilizaciones olvidadas y estatuas que vigilan el borde de un pozo en el que se hallan detenidos seres que no deben volver a pisar la faz de la tierra, Pero estos seres poseen un poder hipnótico capaz de minar la voluntad de quien se les acerque, por lo que, antes de morir en paz, el fugitivo les pide que quemen y esparzan sus cenizas para que su cuerpo no caiga en manos de… los habitantes del pozo.
Gracias por haberme acompañado hasta aquí, espero haberlos entretenido y despertado en ustedes el interés por la fantasía literaria de Abraham Merritt. Nos vemos.
— o —
Te invitamos a seguir leyendo.
Envianos tus consultas a través del email hola@gcomics.online.
Son bienvenidas las propuestas e ideas.
También podés escuchar nuestro PODCAST.
Encuentra los libros que publicamos en papel en NUESTRA TIENDA.
— o —
Seguinos en Telegram, Facebook, Instagram y en Twitter para estar actualizado sobre las novedades de historietas y dibujo.
Estamos también en Google Podcast, Spotify, Itunes, Ivoox, Stitcher y TuneIn.