Gcomics

49ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires

por: Mario Dvorkin

Nuestro cerebro está diseñado, ante todo, para la acción. Por eso, desde nuestros orígenes, los primeros utensilios —ya fueran de piedra, hierro o bronce— estuvieron destinados a facilitarnos la vida en la tierra. Sin embargo, con el tiempo apareció otro tipo de herramienta: más tardía, sí, pero infinitamente poderosa. Primero en tablas de arcilla, luego en papiro, cera, tela y finalmente en papel, surgió una invención destinada a cosas grandiosas.

Desde la aparición del lenguaje —esa herramienta fundamental del pensamiento simbólico— los seres humanos dimos un salto cualitativo en nuestra naturaleza. Ya fuera por el soplo divino, el fuego sagrado, el toque al monolito negro o simplemente por los designios de nuestro código base, el ADN, el lenguaje nos permitió crear historias, imaginar lugares y construir universos enteros. Nos habilitó para vivir millones de vidas distintas y experimentar lo imposible.

No hay herramienta más poderosa que los libros. Son la base del comercio, la religión, la filosofía, la política, las ciencias y el arte. No podemos prescindir de ellos. Y aunque su soporte haya cambiado —e incluso haya vuelto a una forma ancestral, la tableta, ahora de silicio en lugar de arcilla—, su valor sigue intacto. Hoy, incluso habitan dentro de nuestra herramienta más poderosa: el celular.

Desde 1975 he tenido el orgullo y el privilegio de asistir a un evento que para mí representa, al mismo tiempo, una celebración, un homenaje y una fiesta: la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.

En esta 49ª edición (recordemos que dos años fue suspendida por causas de público conocimiento), es un orgullo ver que la cantidad de lectores no solo no ha disminuido, sino que ha crecido. La fascinación por los libros en papel sigue tan viva como siempre.

Y como amante del género, es esperanzador ver que la historieta tiene una presencia tan fuerte en este evento cultural. Ya sea en su forma clásica, como cómic, manga o BD, esta Feria del Libro nos ha presentado una cantidad impresionante de obras de gran calidad, gracias a nuestras editoriales: Primavera Revólver, Ediciones del Zorzal (donde pueden encontrar la genial obra de Goscinny: Astérix, Lucky Luke, Iznogud, El pequeño Nicolás), Ediciones de la Flor (con los libros de nuestros amigos de Banda Dibujada), ADA, Comic.ar, Comic Debris, Hotel de las Ideas, entre muchas otras.

También logramos hacernos un lugar en el stand 213 de Primavera Revólver y Comic Debris, ubicado en el pabellón azul. Allí contamos con la presencia de Guillermo Arena, quien firmó ejemplares de los libros de la editorial Gcomics. Compartimos además un grato momento con Néstor Barrón, que estuvo firmando sus obras publicadas por la editorial Primavera Revólver.

Además, hay ofertas imperdibles: álbumes de Tintín a solo $6.000; Conan en tapa dura por $5.000, junto a Torpedo, La hija del profesor y muchos títulos más; colecciones de lujo en los stands de DNX y Panini Comics; propuestas de Elektra Comics, Espacio Crumb, el pabellón de gremios editores de España en Wallduter (con títulos de Paco Roca en Astiberri); los libros del Zorro Rojo, Pictus, Plan T, Librería Kel, y una parada obligada: el Museo de la Ilustración Gráfica.

En síntesis, para mí, visitar la Feria es como ir a un recital, recorrer un museo o entrar a una juguetería. Es un evento que espero con ansias cada año. Porque, al menos desde mi mirada, es una de esas cosas que —de verdad— redimen a la humanidad.